El alcalde de Magangué-Bolívar, Pedro Alí Alí, advirtió que es muy lamentable que la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, no le haya dado importancia hasta hoy a la problemática del jarrillón que de romperse inundaría el barrio Girardot en menos de 40 minutos.
Precisó que se encuentran paralizadas las obras que se contrataron en el año 2021 y anunció que su Alcaldía dará una indemnización a las familias que aún se encuentran en el lugar para que se reinicien los trabajos.
“En menos de cinco días la zona quedará desocupada para que la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres garantice la continuidad de la contratación”, advirtió el mandatario.
