En un comunicado a la opinión pública, las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada anunciaron un cese de todas sus operaciones.
La decisión se da después que el gobierno de Gustavo Petro, a través de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, Otty Patiño, accediera finalmente a sus peticiones de reactivar el proceso de diálogos exploratorios, que den paso a un eventual acuerdo de paz.
Manifestaron su «compromiso con la búsqueda de una solución política y negociada» decidieron ponerle freno a sus actividades en el territorio.
«Nuestras tropas tanto rurales como urbanas desde la medianoche se encuentran en acuartelamiento y tienen orden de parar todas las operaciones militares», indicaron en el documento.
Por último, hicieron un llamado a la comunidad internacional, agremiaciones indígenas y campesinas así como a la misma Iglesia Católica «para que apoyen y acompañen este esfuerzo por la paz, facilitando espacios de encuentro y velando por el cumplimiento de los acuerdos que aquí se deriven».
