Fuertes cuestionamientos hicieron algunos concejales de Barranquilla al estado de las instalaciones del Concejo Distrital. Consideraron que se trata de una edificación sin condiciones óptimas para trabajar y que pone en riesgo la vida de las personas que asisten allí.
El cabildante José Trocha afirmó que es importante que la ciudadanía se dé cuenta que ellos trabajan desde unas ratoneras e instalaciones inundadas de excremento de palomas. “No hay manera de proteger la integridad física de las personas porque las condiciones de este edificio no lo permiten. Al doctor Chacho Carbó tocó cargarlo en muchas oportunidades para que él pudiese venir a ejercer su derecho constitucional”, dijo.
A su turno, el presidente del Concejo, Andrés Ortiz, expresó que las condiciones de este edificio son deplorables, tristes e inhumanas. “Cada semana toca organizar un programa de fumigación por la cantidad de roedores y también batallamos con los malos olores”, sostuvo.
Ortiz añadió que el Concejo de Barranquilla se encuentra en dificultades operativas, sin embargo, preocupa más el estado de la estructura por posibles filtraciones de agua, por lo que buscará un topógrafo o ingeniero para que evalúe el riesgo y así evitar consecuencias como el colapso del edificio.
