El proyecto de construcción de viviendas para ser entregadas a 111 familias damnificadas de la ola invernal de 2010 en Manatí, se ha convertido en un elefante blanco, está abandonado y los beneficiarios de ese programa, siguen sufriendo la desidia del Gobierno Nacional.
La voz de alerta la lanzó el diputado Jorge Rosales, quien visitó recientemente esa población del Sur del departamento, en la que se observa que 8 años después de la tragedia invernal, la Urbanización Nueva Manatí, avanza solo en un 30 por ciento.
“El proyecto lo ejecuta el Fondo de Adaptación a través del operador Comfenalco Valle. Además del abandono en las obras, la comunidad nos dijo que a los trabajadores no se les paga desde hace 6 meses”, manifestó el dirigente político.
Este nuevo drama que sufren las familias damnificadas del Sur del Atlántico va a ser objeto de debate en la Asamblea, expresó el diputado Rosales Steel.