Conseguir que una cadera rota fuera reconstruida, a partir una impresión en 3D como guía, ha sido uno de los logros de la ciencia, esta vez de la mano con la tecnología.
De polvo cerámico, uno de los materiales utilizados en la impresión 3D, se pudo elaborar en tamaño real, la cadera de un motociclista que había sufrido una grave fractura.
Daniel Quiceno, diseñador industrial vinculado a la firma Creadores 3D, explicó que lo anterior, recreado con la fisura original, permitió que el médico bogotano Saúl Martínez Prieto estudiara previamente el tipo de fractura y luego procediera con gran fundamento a realizar esta cirugía, la primera que se practica en el país y en un tiempo record.
Otros médicos utilizan esta tecnología para planificar cirugías a corazón abierto. A partir de una resonancia magnética se elabora una réplica 3D del corazón con todas las estructuras internas iguales a las del paciente, lo que permite al médico planear la intervención de forma más eficiente.