Saldo en rojo, con un déficit que está en el orden de los 689 millones de pesos, registró el Hospital Cari durante su gestión financiera del último año, reveló el proceso de rendición de cuentas realizado el día anterior.
Se observó una disminución en la facturación del 53 por ciento en comparación con el año 2017, esto producto de la baja venta de servicios.
Igualmente los recaudos disminuyeron en un 37 por ciento, reveló el equipo administrativo del hospital, que reconoció una reducción en la oferta del servicio del orden del 51 por ciento.
En este sentido, se registró una disminución en hospitalización, consulta externa, cirugía, cuidados intensivos entre otros servicios.
El gerente Ulhay Beltrán, precisó que los bajos ingresos obedecieron a la menor facturación.
Para la reactivación del Hospital se aplicarán estrategias que contemplan un plan de choque para reactivar algunos servicios y la presentación ante la junta directiva de un modelo a seguir para superar la crisis.