Los desplazados por la violencia y víctimas de la ola invernal de 2010 que invadieron 141 casas del programa de vivienda gratis del Gobierno Nacional en el municipio de Suán, pidieron la ayuda del gobernador Eduardo Verano, para que no se efectúe el desalojo que está programado para este 19 de abril.
Señalaron que se vieron obligados a ocupar las casas del barrio La Inmaculada Concepción, al considerar que hay irregularidades en el proceso de adjudicación en donde entregaron inmuebles a familiares de dirigentes políticos, a propietarios de tiendas oriundos del interior del país, e incluso a trabajadores de la Alcaldía.
Señalaron los ocupantes de estos inmuebles, que no van a salir hasta que se les dé una solución para que puedan tener sus casas y temen por un desalojo a sangre y fuego.