Luis Alberto Moreno, presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, reveló en el informe del Observatorio de Ciberseguridad de América Latina y el Caribe, que la gran mayoría de los países aún no están preparados para contrarrestar la amenaza del cibercrimen.
Según el estudio, el cibercrimen (uso ilícito de equipos para promover o realizar prácticas ilegales como la pornografía infantil, el robo de información personal o violación de las leyes de asociación, difamaciones, etc), le cuesta al mundo cerca US$575.000 millones al año, lo que representa 0,5% del Producto Interno Bruto, PIB global, es decir casi cuatro veces más que el monto anual de las donaciones para el desarrollo internacional.
Moreno argumenta en el estudio que en América Latina y el Caribe, este tipo de delitos cuestan alrededor de US$90.000 millones al año, recursos con los cuales se podría cuadruplicar el número de investigadores científicos de la región.
Agrega que los latinoamericanos cada vez más adoptan las nuevas tecnologías con beneplácito, evidenciando que son el cuarto mayor mercado móvil, pues la mitad de la población usa Internet y los gobiernos emplean cada vez más medios digitales para comunicarse y brindar servicios a los ciudadanos.
Sin embargo, hace un llamado pues aún falta fortalecimiento en materia de prevención y mitigación de los riesgos frente a la actividad delictiva en el ciberespacio. Informó que cuatro de cada cinco países no posee estrategias de ciberseguridad o planes de protección de infraestructura crítica.
Sumado a ello, dos de cada tres no tiene un centro de comando y control de seguridad cibernética y la mayoría de las fiscalías carece de capacidad para perseguir los delitos cibernéticos.
Retos
Moreno precisó en el informe que urge crear una infraestructura digital moderna, robusta y segura, ya que la protección a los ciudadanos es un elemento clave para el desarrollo.
Sin duda parte de estas herramientas de consolidación y fortalecimiento para combatir el cibercrimen podrán encontrarse del 17 al 19 de agosto en la Feria Internacional de Seguridad en Corferias, pues este será el centro de soluciones para todas las verticales del sector de la seguridad, en donde visitantes e inversionistas conocerán las últimas tecnologías en el mercado y lo que las empresas, hogares y entidades gubernamentales pueden implementar para ser parte del entusiasmo latinoamericano por combatir el cibercrimen (seguridad informática), abarcando además dos fuertes frentes, como lo son la seguridad física, laboral y la prevención de desastres.